Me gustaría compartir con vosotros mi reflexión personal sobre las consecuencias directas que están teniendo la guerra prolongada en Ucrania, la inflación continuada y la crisis energética sobre nuestras líneas de negocio; y cómo el nivel de endeudamiento de las economías avanzadas está impactando en el ciudadano de a pie. Un ejemplo de todo ello es el colapso del sistema sanitario y cómo los retrasos en las citas de los hospitales están obligando a una parte muy importante de la sociedad a contratar seguros privados de salud. Además, el ciudadano, tiene que repensar cómo no incurrir en gastos extras relacionados con el hogar y el coche, si no quiere ahogar más su ya maltrecho bolsillo. Ante esta situación el precio del dinero aumentará, y eso frenará el consumo. Los préstamos -tanto los créditos al consumo como los hipotecarios o para empresas- serán más caros, lo que los hará menos atractivos y conllevará una menor demanda de crédito y, posiblemente, un mayor nivel de morosidad.

La renta disponible de muchos españoles se ha reducido en muy poco tiempo y el sector asegurador juega un papel clave, aportando tranquilidad ante ciertos riesgos y reduciendo la incertidumbre en momentos críticos de nuestros clientes. En este contexto, en AXA Partners, ofrecemos coberturas que ayudan a superar situaciones como: una situación de desempleo sobrevenida y la imposibilidad de asumir los pagos del día a día, como la luz, el gas, los colegios o incluso las primas de seguros o hipotecas.

Ante esta situación, los ciudadanos tenemos que ser especialmente cautos con los gastos extras que pudieran derivarse en nuestros hogares por las consecuencias extremas del clima como las danas (que tantas inundaciones, goteras, roturas de cristales y persianas provocan) o por el uso casi permanente de las segundas residencias, que, con la llegada del modelo laboral híbrido y el traslado de mucha gente a ellas, generan costes extras por la falta de preparación para un uso tan constante.

A finales de año se estabilizó el sector de viajes, tras el parón que vivió durante la pandemia y, hoy, este segmento se prepara para dar respuesta a un nuevo viajero que demanda inmediatez y flexibilidad tanto en la contratación del seguro como en la asistencia, pero sobre todo seguridad y protección. Un viajero que quiere continuar viajando, pero no quiere hacerlo en ningún caso asumiendo riesgos innecesarios. En AXA Partners, que conocemos el segmento travel en profundidad, estamos comprobando que lo que antes era un extra ahora es una “commodity” y que esta tendencia ha venido para quedarse.

 El sector de los seguros y de la asistencia asumen en esta situación inflacionista un papel fundamental a la hora de combatir estos riesgos, garantizando una mayor resiliencia e impulsando la estabilidad a largo plazo.